¿Buscas tomarte un merecido respiro en tu aprendizaje del italiano? Ponte el delantal y ¡manos a la cocina!
Cuando se trata de comida, pocos países pueden competir con las delicias culinarias de Italia. Desde abundantes platos de pasta hasta irresistibles postres, la cucina italiana, conocida por sus sabores audaces e ingredientes frescos, ha conquistado el mundo.
Ya seas principiante o estudiante avanzado de italiano, aprender el idioma a través de la cocina puede ser una forma divertida y deliciosa de practicar tus habilidades lingüísticas, ampliar tu vocabulario y descubrir las diferentes regiones de Italia.
Desde la pasta hasta la pizza, y todo lo que hay entre medio, acompáñanos en la cocina de tu Nonna mientras exploramos 10 platos italianos icónicos que despertarán tu paladar y te sumergirán en la cultura italiana.
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La pasta
“Todo lo que ves, se lo debo al espagueti”, dijo una vez Sophia Loren.
Tanto si eres un chef experimentado como un novato culinario, no se puede pasar por alto el papel fundamental que juega la pasta en la cocina italiana. El país cuenta con más de 350 formas conocidas de pasta y un número incalculable de platos, que van desde la pasta alla norma de Sicilia (con berenjenas, salsa de tomate y ricotta) hasta los agnolotti (un tipo de ravioli relleno de Piamonte), pasando por los tortellini in brodo de Bolonia (pequeños raviolis cocidos en caldo) hasta el emblemático cacio e pepe romano (con queso pecorino y pimienta). Las posibilidades son infinitas, ragazzi.
Con un consumo promedio de 27 kilos de pasta por italiano al año, este alimento básico ha sido parte de la tradición culinaria del país durante siglos, convirtiéndose en uno de sus platillos más queridos.
Bistecca alla fiorentina
Vegetarianos, desvíen la mirada; carnívoros, afilen sus cuchillos y pongan a prueba sus habilidades con la bistecca alla fiorentina. En tu próximo viaje a Florencia, encontrarás este grueso y jugoso filete T-bone en cualquier trattoria. La tradición indica que este plato de carne debe servirse a la parrilla, ligeramente sazonado con sal, pimienta y un toque de aceite de oliva, acompañado de verduras (contorni). Tómate un momento para agradecer a los Médici por este manjar.
La pizza
Pasamos a uno de los platos más emblemáticos de Italia, que ha dejado una huella imborrable en los seis continentes. La pizza tiene la capacidad de satisfacer prácticamente cualquier antojo que siga la doctrina de masa y cobertura. Nadie puede resistirse al aroma de masa recién horneada, cubierta con salsa de tomate dulce y ácida, y mozzarella derretida, ¿verdad?
En su tierra natal, esta maravilla redonda de 30 cm no es solo comida; es un estilo de vida, un símbolo de familia, tradición y comunidad. Los italianos (especialmente los napolitanos) se toman su pizza muy en serio, con estrictas reglas sobre el tipo de harina, salsa de tomate y queso que se pueden usar.
¿Sabías que hay muchas variaciones de pizza? En Roma, por ejemplo, se disfruta la pizza al taglio (“pizza por porción”), mientras que en Nápoles, es común encontrar la pizza fritta, uno de los alimentos callejeros más populares de la ciudad.
Lasaña
Aunque es una forma derivada de consumir pasta, creemos que la lasaña merece una mención especial. Capas y más capas de pasta, queso burbujeante y carne picada o verduras componen este plato reconfortante y abundante. Aunque los orígenes de la lasaña se remontan a la Antigua Grecia, los historiadores coinciden en que la versión moderna se inventó entre 1544 y 1692, probablemente en Emilia Romaña o Nápoles.
De hecho, una de las primeras recetas documentadas de lasaña aparece en un libro de cocina llamado Libro de Arte Coquinaria (El arte de cocinar), del chef italiano del siglo XV Maestro Martino. Aunque esta receta utilizaba masa fermentada en lugar de pasta, la técnica de las capas era similar a la versión moderna.
Sfogliatelle
Pasamos al menú de postres con este dulce tradicional del siglo XVIII de la región de Campania, y una especialidad local en Nápoles. A menudo disfrutadas como desayuno o tentempié de media mañana con un café, las sfogliatelle están hechas con masa de hojaldre rellena de ricotta endulzada y aromatizada con cáscara de naranja y canela.
El término proviene de la palabra italiana sfoglia, que significa “hoja” o “lámina”, en referencia a las muchas capas de masa que componen el postre.
Risotto
Nos dirigimos al norte, a la tierra del risotto, un plato que ocupa un lugar destacado en los rankings culinarios italianos. Este plato básico se remonta al siglo XIV, cuando el arroz comenzó a cultivarse en las fértiles llanuras del norte de Italia, especialmente en Lombardía y Piamonte.
La receta tradicional implica usar un tipo especial de arroz de grano corto (Arborio o Carnaroli), cocido y mezclado con caldo hasta alcanzar una consistencia cremosa. Este icónico plato italiano puede prepararse de muchas formas, destacando diferentes verduras, embutidos o simplemente con un caldo y Parmigiano.
Tiramisú
Ninguna lista de platos italianos estaría completa sin mencionar el tiramisú (literalmente, “levántame”). Este delicioso postre, presente en los menús de todos los restaurantes italianos del mundo, combina capas de queso mascarpone, huevos y bizcochos (savoiardi) generosamente empapados en espresso.
Arancini
Los arancini son un tipo de donas saladas, originarios de Sicilia, rellenos de arroz, guisantes y queso Parmigiano. Su nombre significa “pequeñas naranjas” en referencia a su forma y color.
Minestrone
Cargado de coloridas verduras, legumbres y pasta, el minestrone es una sopa reconfortante que tiene sus raíces en la cocina campesina italiana.
Fritto misto
Terminamos esta lista con el fritto misto, un plato tradicional que consiste en una mezcla de mariscos y verduras fritos. Ideal para compartir.
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¡Buon appetito!
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